Los componentes naturales del ambiente

Los componentes naturales de ambiente: el relieve 

El ambiente es el conjunto de todos los elementos rurales y sociales que permiten el desarrollo de la vida y de las actividades humanas. El relieve es uno de los componentes naturales del ambiente. Es la forma que tiene l superficie terrestre en las distintas zonas del planeta. 

Las llanuras 

Son grandes extensiones planas de baja altura (algunas presentan un declive muy pequeño), lo que facilita la construcción de caminos y ferrocarriles. En el este y el centro del territorio continental de la Argentina se encuentra la llanura chaco-pampeana. este se divide en dos: la llanura chaqueña, que abarca el norte de la provincia de Santa Fe, Corrientes, Chaco, Santiago del Estero y Formosa, y la llanura pampeana, en las provincias de Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba, La Pampa y Entre Ríos. 

Las sierras 

Las sierras son elevaciones del terreno de menor altura que las montañas. en la Argentina se hallan las sierras pampeanas, que se encuentra en el centro-oeste de territorio continental americano, en las provincias de Córdoba, San Luis, La Rioja, Catamarca, San Juan y Tucumán, y las sierras de Tendilia y Ventania, en la provincia Buenos Aires. las sierras pampeana tienen una altura que no supera los 3.000 metros: el pico más alto en el cerro Champaquí, en Córdoba, con 1.790 metros. Este conjunto serrano se extiende en una zona donde las lluvias son escasas durante el invierno y se producen de manera torrencial durante e verano. por eso, en esta estación los ríos y arroyos de la región son muy caudalosos. Estas zonas serranas son valoradas por sus paisajes, que combinan sierras y ríos. Por este motivo, la actividad principal allí es el turismo. 

Las montañas 

Son relieves de formas muy variadas y gran altura. Cuando están unidas entre sí, forman cordilleras. La cordillera de los andes es el conjunto de montañas que recorre del oeste de la Argentina. Esta cadena montañosa ocupa todo el oeste de américa y forma el límite entre Argentina y Chile. El sector norte de la cordillera recibe el nombre de Andes Áridos: en este sector se ubican las montañas más altas, como el correo Aconcagua, que llega a los 6.961 metros y es la mayor altura de América. En este sector hay una gran variación de temperatura entre el día y la noche, y la aridez es extrema, lo que dificulta la práctica de la agricultura y la ganadería. por eso, es una de las regiones menos pobladas de la Argentina. 
En el sector sur encuentran Andes Húmedos. Allí, las montañas están separadas por valles amplios que permiten el paso de los vientos húmedos que llegan desde el océano Pacífico. Hay importantes lagos y campos de hielo, como el glaciar Perito Moreno, en Santa Cruz. La nieve que se acumula en el invierno se derrite durante el verano, y alimenta ríos que los agricultores usan para el riego de cultivo en zonas donde se escasean las lluvias Estas montañas contienen minerales, como el cobre y el oro, que son aprovechados por la actividad minera. 

Las mesetas 

Son relieves planos y elevados, formados por rocas muy antiguas y resistentes. En la Argentina hay dos muy importantes: la meseta patagónica, que se extiende por las provincias del Neuquén, Río Negro, Chubut y Santa Cruz, y la meseta misionera.

• La meseta misionera ocupa la provincia de Misiones y el norte de Corrientes. Se encuentran muy desgastada por los ríos que la recorren. Las rocas que la forman son resistentes y los desniveles hacen que los ríos formen saltos y cascadas, como las Cataratas del Iguazú. Esta meseta está cubierta por la selva; sin embargo, en ciertos sectores la vegetación esta siendo reemplazada por cultivos como el tabaco y la yerba mate. 
• Las mesetas patagónicas se presentan de forma aislada en las provincias que se ubican al sur del río Colorado. Tienen mayor altura en el oeste, y terminan sobre la costa del mar Argentino, formando acantilados sobre playas. En estas mesetas, las condiciones ambientales son aprovechadas para la cría de ovejas, ya que estos animales toleran muy bien el frío. Los ríos se aprovechan para producir electricidad y para el riego de las plantaciones.